Continúo con la segunda entrega del comentario a los cincuenta volúmenes que han supuesto estos treinta y cinco años de Superlópez.
Tomo decimoprimero. Cachabolik Blues Rock y El Fantasma del Museo del Prado.
Primera edición: Septiembre de 1988. Las fechas en las que Jan da por concluidas las historias son febrero de 1988 y marzo de 1988, respectivamente. Costaba 225 pesetas (un euro con treinta y cinco).
Este álbum cuenta con dos historias sin relación (la primera de ocho capítulos y . Es la primera vez que la aventura toma forma de crítica social. Cada vez que Jaime es el principal de los secundarios (¡qué galimatías!), la trama se centra en problemas reales de la gente corriente, especialmente de los jóvenes. También Martha es un personaje que pasa de ladrona de bancos por afición (y porque su padre, el Inspector Holmez) es un muermo de mucho cuidado. Los malos son Al Trapone y sus secuaces: Carasucia y Carapincho.
¿De qué va la historia? Pues es una mezcla entre el flautista de Hamelín, las zapatillas de baile (sí, esas que si te las ponías, no podías dejar de bailar hasta que la palmabas) y el Fantasma del Paraíso (ya sé que no mucho, pero me recuerda a ese personaje de la película de Brian de Palma con sus teclados y tal). Lo gracioso es ver a Superlópez de rockero que cuando arregla el percal se va a su Villa Soledad para escuchar a María del Mar Bonet.
Pienso que en Martha hay una crítica a la época en la que Jan dibujaba para Bruguera las adaptaciones de Heidi y Marco cuando Martha afirma que saca mucho más dinero de sus dibujos de estas series que cuando hace su arte.
La historia del Museo del Prado es una broma con el propio Jan como personaje. Al final se entiende que Superlópez lo pasase mal (bueno, medio mal) en la siguiente aventura. Creo que es un capricho personal del propio autor que es un lujo que podamos disfrutar los demás.
Tomo decimosegundo. En el país de los juegos el tuerto es el Rey.
Primera edición: Noviembre de 1988. Jan lo terminó en agosto de ese mismo año. El precio sigue siendo el mismo.
Todo empieza cuando Luisa, Juan y Jaime tienen catorce acertados en las quinielas y deciden ir a Tontecarlo a pasar unas vacaciones. El plano de Europa es de coña total. Donde está la Península Ibérica está Andorra (sólo Andorra), después Tontecarlo en el sitio de Francia y más al norte, en este orden de oeste a este, Portugal, Francia e Irán. ¡Toma ya!
La capital de Tontecarlo es Tontika, que deja a Las Vegas como capital de segunda del juego mundial y el Rey es Akitespero I. El malo es Refuller, al que veremos más adelante. Todo va de un país acostumbrado a no dar ni palo en el que el Juego es todo y con un empresario empeñado en cambiar las cosas, o algo así. Luisa, ¿cómo no? termina secuestrada, con Jaime y Juan (casi tanto como Superlópez) tratan de poner las cosas en su sitio y volver sanos y salvos a casa.
Tomo decimotercero. El Génesis de Superlópez 1973 – 1975.
Primera edición: julio de 1989. No hay material nuevo. Subió el precio a 250 pesetas (un euro y medio).
Quince años después de su aparición como personaje, el tomo trece (puede que por si acaso nos da mala suerte) no tiene nada nuevo que ofrecer. Es el único tomo de esta índole que se ha publicado y es una pena que no se haya ampliado en ocasiones posteriores. Cuenta con un prólogo de Antonio Martín y los treinta y ocho chistes en formato apaisado que constituyen el álbum que la Editorial Euredit publicó en 1973.
Después, una colección de las historias publicadas por Bruguera en las que el humorista Conti (que firma como Pepe) es el guionista. Son gags de una página con un pequeño chiste en cada una y la curiosidad es que Superlópez está casado y su mujer tiene un papel importante. Son graciosos, pero nada más. No hubiera pasado a la historia del tebeo español por esto, más que como una pequeña anécdota. Aún así espero que publiquen otro tomo con las historias de tamaño medio que hizo Jan con Pérez Navarro en los setenta (mi favorita; El Doble).
Tomo decimocuarto. Superlópez en El Asombro del Robot y Una vez, en una ciudad.
Primera edición: septiembre de 1989. Jan acaba la primera historia en noviembre del 86 y la otra en el año 1984. El precio es 250 pesetas.
La primera historia está claramente influida por la película Cortocircuito. Un par de robocitos le dan caña a Superlópez en un robo de banco. El robot número uno sale dañado y da con Martha, que cuida de él y le enseña cosas que merecen la pena (libros, música, etc.). Escariano, mientras tanto, trata de recuperarlo para ponerlo otra vez en marcha para sus fines criminales. Al final, lucha de roboces y un final feliz muy agradable.
Una vez en la ciudad es una historia antigua, recuperada, con un mega robot controlado por un chaval que le da guerra a Superlópez. No es una historia muy lograda, aunque recuerda a la época del Supergrupo.
Tomo decimoquinto. Los Petisos Carambanales y otras petisoperías.
Primera edición: noviembre de 1989. La única fecha que he encontrado es la de la segunda historia y es de abril de 1989. 250 pesetas.
Estamos ante un álbum atípico en las aventuras de Superlópez. Si os habéis fijado, en las viñetas de Superlópez hay unos bichillos amarillos que aparecen como relleno, al estilo de los gatos y ratones en los tebeos de Mortadelo y Filemón. Pues bien, se conoce que Jan quiso sacar partido de ellos. Nunca se sabe. Peyo se forró con los Pitufos y sólo eran unos secundarios de su serie principal la de Joan y Pirulit.
El álbum cuenta con dos historias. La primera está escrita al estilo de “Elige Tu Propia Aventura”, aquellos libros en los que tenías varias opciones para seguir la historia, dependiendo de tus decisiones y si eras más o menos perspicaz, terminabas con éxito la peripecia. En este caso es casi mejor pensar mal, porque no acertarás, pero sí te reirás. Fue un experimento gracioso y acertado, pero no más, por favor.
La segunda historia tiene lugar en el planeta de los Petisos y se ve que Jan también quería crearles un idioma que con clave el lector pudiera descifrarlo. Recuerda un pelín a Gulliver en Lilliput.
Tomo decimoprimero. Cachabolik Blues Rock y El Fantasma del Museo del Prado.
Primera edición: Septiembre de 1988. Las fechas en las que Jan da por concluidas las historias son febrero de 1988 y marzo de 1988, respectivamente. Costaba 225 pesetas (un euro con treinta y cinco).
Este álbum cuenta con dos historias sin relación (la primera de ocho capítulos y . Es la primera vez que la aventura toma forma de crítica social. Cada vez que Jaime es el principal de los secundarios (¡qué galimatías!), la trama se centra en problemas reales de la gente corriente, especialmente de los jóvenes. También Martha es un personaje que pasa de ladrona de bancos por afición (y porque su padre, el Inspector Holmez) es un muermo de mucho cuidado. Los malos son Al Trapone y sus secuaces: Carasucia y Carapincho.
¿De qué va la historia? Pues es una mezcla entre el flautista de Hamelín, las zapatillas de baile (sí, esas que si te las ponías, no podías dejar de bailar hasta que la palmabas) y el Fantasma del Paraíso (ya sé que no mucho, pero me recuerda a ese personaje de la película de Brian de Palma con sus teclados y tal). Lo gracioso es ver a Superlópez de rockero que cuando arregla el percal se va a su Villa Soledad para escuchar a María del Mar Bonet.
Pienso que en Martha hay una crítica a la época en la que Jan dibujaba para Bruguera las adaptaciones de Heidi y Marco cuando Martha afirma que saca mucho más dinero de sus dibujos de estas series que cuando hace su arte.
La historia del Museo del Prado es una broma con el propio Jan como personaje. Al final se entiende que Superlópez lo pasase mal (bueno, medio mal) en la siguiente aventura. Creo que es un capricho personal del propio autor que es un lujo que podamos disfrutar los demás.
Tomo decimosegundo. En el país de los juegos el tuerto es el Rey.
Primera edición: Noviembre de 1988. Jan lo terminó en agosto de ese mismo año. El precio sigue siendo el mismo.
Todo empieza cuando Luisa, Juan y Jaime tienen catorce acertados en las quinielas y deciden ir a Tontecarlo a pasar unas vacaciones. El plano de Europa es de coña total. Donde está la Península Ibérica está Andorra (sólo Andorra), después Tontecarlo en el sitio de Francia y más al norte, en este orden de oeste a este, Portugal, Francia e Irán. ¡Toma ya!
La capital de Tontecarlo es Tontika, que deja a Las Vegas como capital de segunda del juego mundial y el Rey es Akitespero I. El malo es Refuller, al que veremos más adelante. Todo va de un país acostumbrado a no dar ni palo en el que el Juego es todo y con un empresario empeñado en cambiar las cosas, o algo así. Luisa, ¿cómo no? termina secuestrada, con Jaime y Juan (casi tanto como Superlópez) tratan de poner las cosas en su sitio y volver sanos y salvos a casa.
Tomo decimotercero. El Génesis de Superlópez 1973 – 1975.
Primera edición: julio de 1989. No hay material nuevo. Subió el precio a 250 pesetas (un euro y medio).
Quince años después de su aparición como personaje, el tomo trece (puede que por si acaso nos da mala suerte) no tiene nada nuevo que ofrecer. Es el único tomo de esta índole que se ha publicado y es una pena que no se haya ampliado en ocasiones posteriores. Cuenta con un prólogo de Antonio Martín y los treinta y ocho chistes en formato apaisado que constituyen el álbum que la Editorial Euredit publicó en 1973.
Después, una colección de las historias publicadas por Bruguera en las que el humorista Conti (que firma como Pepe) es el guionista. Son gags de una página con un pequeño chiste en cada una y la curiosidad es que Superlópez está casado y su mujer tiene un papel importante. Son graciosos, pero nada más. No hubiera pasado a la historia del tebeo español por esto, más que como una pequeña anécdota. Aún así espero que publiquen otro tomo con las historias de tamaño medio que hizo Jan con Pérez Navarro en los setenta (mi favorita; El Doble).
Tomo decimocuarto. Superlópez en El Asombro del Robot y Una vez, en una ciudad.
Primera edición: septiembre de 1989. Jan acaba la primera historia en noviembre del 86 y la otra en el año 1984. El precio es 250 pesetas.
La primera historia está claramente influida por la película Cortocircuito. Un par de robocitos le dan caña a Superlópez en un robo de banco. El robot número uno sale dañado y da con Martha, que cuida de él y le enseña cosas que merecen la pena (libros, música, etc.). Escariano, mientras tanto, trata de recuperarlo para ponerlo otra vez en marcha para sus fines criminales. Al final, lucha de roboces y un final feliz muy agradable.
Una vez en la ciudad es una historia antigua, recuperada, con un mega robot controlado por un chaval que le da guerra a Superlópez. No es una historia muy lograda, aunque recuerda a la época del Supergrupo.
Tomo decimoquinto. Los Petisos Carambanales y otras petisoperías.
Primera edición: noviembre de 1989. La única fecha que he encontrado es la de la segunda historia y es de abril de 1989. 250 pesetas.
Estamos ante un álbum atípico en las aventuras de Superlópez. Si os habéis fijado, en las viñetas de Superlópez hay unos bichillos amarillos que aparecen como relleno, al estilo de los gatos y ratones en los tebeos de Mortadelo y Filemón. Pues bien, se conoce que Jan quiso sacar partido de ellos. Nunca se sabe. Peyo se forró con los Pitufos y sólo eran unos secundarios de su serie principal la de Joan y Pirulit.
El álbum cuenta con dos historias. La primera está escrita al estilo de “Elige Tu Propia Aventura”, aquellos libros en los que tenías varias opciones para seguir la historia, dependiendo de tus decisiones y si eras más o menos perspicaz, terminabas con éxito la peripecia. En este caso es casi mejor pensar mal, porque no acertarás, pero sí te reirás. Fue un experimento gracioso y acertado, pero no más, por favor.
La segunda historia tiene lugar en el planeta de los Petisos y se ve que Jan también quería crearles un idioma que con clave el lector pudiera descifrarlo. Recuerda un pelín a Gulliver en Lilliput.
Tomo decimosexto. Los cerditos de Campodrón.
Primera edición: abril de 1990. Seguía costando 250 pesetas.
Este es uno de mis álbumes favoritos e inaugura una estupenda época del personaje, continuada por el Periplo Búlgaro. La historia de misterio envuelve a los personajes (otra vez Juan, Luisa, Jaime y de malo Al Trapone, genial). Campodrón está representado al detalle y creo que es por eso por lo que me gusta tanto, aparte de la trama tan bien urdida. Ya intentó Jan dar mucha presencia a la localización de la historieta en el tomo doce con la representación del románico de la ciudad del Tontika y el Prado del tomo once. Es una característica que no se prodiga en todos los tomos siguientes, pero que se agradece enormemente. Gracias Jan. Chico aparece por fin y ya tenemos el binomio Martha-Chico en su germen. Chico trabaja para Al Trapone, pero Superlópez destroza los planes de nuestro mafiosote favorito y rescata al muchacho.
Escribiendo esta entrada en el blog sobre este magnífico tomo, no he podido resistirme y lo he releído de nuevo. ¡Qué gozada!
Primera edición: abril de 1990. Seguía costando 250 pesetas.
Este es uno de mis álbumes favoritos e inaugura una estupenda época del personaje, continuada por el Periplo Búlgaro. La historia de misterio envuelve a los personajes (otra vez Juan, Luisa, Jaime y de malo Al Trapone, genial). Campodrón está representado al detalle y creo que es por eso por lo que me gusta tanto, aparte de la trama tan bien urdida. Ya intentó Jan dar mucha presencia a la localización de la historieta en el tomo doce con la representación del románico de la ciudad del Tontika y el Prado del tomo once. Es una característica que no se prodiga en todos los tomos siguientes, pero que se agradece enormemente. Gracias Jan. Chico aparece por fin y ya tenemos el binomio Martha-Chico en su germen. Chico trabaja para Al Trapone, pero Superlópez destroza los planes de nuestro mafiosote favorito y rescata al muchacho.
Escribiendo esta entrada en el blog sobre este magnífico tomo, no he podido resistirme y lo he releído de nuevo. ¡Qué gozada!
Tomo decimoséptimo. Periplo búlgaro.
Primera edición: julio de 1990. Las fechas de producción de Jan son marzo de 1989 para la primera aventura y de octubre de 1989 para la segunda. Sigue costando 250 pesetas.
Otra joya de la producción de Jan dentro de la serie de Superlópez. Esta vez la aventura empieza cuando el Jefe está todito de color verde por haber tomado un caramelo en una situación poco menos que embarazosa. Detrás de todo están Escariano y Al Trapone, que aprovechan la circunstancia para chantajearle. Luisa, Jaime y Juan tienen que ir a Bulgaria para solucionarlo, situación que explota Jan para regalarnos con una magnífica colección de localizaciones del país.
La página está reducida, con franjas azules en la parte superior e inferior. No sé cuál fue el objetivo, pero no se repitió.
El álbum se completa con una preciosa historia corta protagonizada por Luisa, aunque salgan todos los personajes. Recuerda a una típica historia de fantasía con fantasmas, al estilo del Fantasma de Canterbury o los cuentos de mi molino. Uno de los hitos de las aventuras de Superlópez en formato reducido. ¡Ah! El título es el Tesoro del Conde Arnau y trata sobre un estafador que quiere liar al trío protagonista, pero termina en la comisaría de Hólmez. La representación del claustro demuestra el interés de Jan por la localización de las aventuras de Superlópez. Está claro que esta serie ya no tiene nada de paródico (aunque nunca pierde su aspecto humorístico, afortunadamente) y mucho de libertad creativa.
Primera edición: julio de 1990. Las fechas de producción de Jan son marzo de 1989 para la primera aventura y de octubre de 1989 para la segunda. Sigue costando 250 pesetas.
Otra joya de la producción de Jan dentro de la serie de Superlópez. Esta vez la aventura empieza cuando el Jefe está todito de color verde por haber tomado un caramelo en una situación poco menos que embarazosa. Detrás de todo están Escariano y Al Trapone, que aprovechan la circunstancia para chantajearle. Luisa, Jaime y Juan tienen que ir a Bulgaria para solucionarlo, situación que explota Jan para regalarnos con una magnífica colección de localizaciones del país.
La página está reducida, con franjas azules en la parte superior e inferior. No sé cuál fue el objetivo, pero no se repitió.
El álbum se completa con una preciosa historia corta protagonizada por Luisa, aunque salgan todos los personajes. Recuerda a una típica historia de fantasía con fantasmas, al estilo del Fantasma de Canterbury o los cuentos de mi molino. Uno de los hitos de las aventuras de Superlópez en formato reducido. ¡Ah! El título es el Tesoro del Conde Arnau y trata sobre un estafador que quiere liar al trío protagonista, pero termina en la comisaría de Hólmez. La representación del claustro demuestra el interés de Jan por la localización de las aventuras de Superlópez. Está claro que esta serie ya no tiene nada de paródico (aunque nunca pierde su aspecto humorístico, afortunadamente) y mucho de libertad creativa.
Tomo decimoctavo. La Banda del Dragón Despeinado y La Bomba.
Primera edición: diciembre de 1990. Fecha de Jan: abril del 90, aunque se ve que la primera historia es de 1989. No cambia de precio.
Otro álbum de localización espectacular. Esta vez en Japón. La moda del Manga asalta España y Jan se hace eco de ella, pero profundizando en la cultura japonesa. Todo empieza con el pasado como pugilista del Jefe y su relación con una banda de Yakuzas. Está visto que el Jefe es un filón para meter en líos a Superlópez.
El álbum no tiene ni pizca de desperdicio. Jan retrata la cultura japonesa en todos los aspectos, en la medida en que las cuarenta y tantas páginas de historia le permiten hacerlo. Vemos las tradiciones, las características del comportamiento japonés, la modernidad, la afición por el golf, el juego, el honor y el respeto, el idioma, las mil y una posibilidades de meter la pata con una palabra mal pronunciada, los avances tecnológicos, especialmente el tren bala, y ¿cómo no? las bandas de yakuza y ¡Los mega robots! La secundaria es Arigato Gozaimas (¡qué leche tiene Jan con los nombres!) y sustituye a Luisa y a Jaime en la mayor parte de la aventura, pienso yo que Jan dejó descansar a los secundarios, después de haberlos hecho tan partícipes en los álbumes anteriores.
El segundo relato es ¡Banzai! (La bomba). Aquí el McGuffin es una bomba de la segunda guerra mundial. Jaime tiene mucho papel en la aventura. Es maja, pero no demasiado interesante. Suena a relleno tras una aventura tan sumamente desarrollada como la de la Banda del Dragón.
Primera edición: diciembre de 1990. Fecha de Jan: abril del 90, aunque se ve que la primera historia es de 1989. No cambia de precio.
Otro álbum de localización espectacular. Esta vez en Japón. La moda del Manga asalta España y Jan se hace eco de ella, pero profundizando en la cultura japonesa. Todo empieza con el pasado como pugilista del Jefe y su relación con una banda de Yakuzas. Está visto que el Jefe es un filón para meter en líos a Superlópez.
El álbum no tiene ni pizca de desperdicio. Jan retrata la cultura japonesa en todos los aspectos, en la medida en que las cuarenta y tantas páginas de historia le permiten hacerlo. Vemos las tradiciones, las características del comportamiento japonés, la modernidad, la afición por el golf, el juego, el honor y el respeto, el idioma, las mil y una posibilidades de meter la pata con una palabra mal pronunciada, los avances tecnológicos, especialmente el tren bala, y ¿cómo no? las bandas de yakuza y ¡Los mega robots! La secundaria es Arigato Gozaimas (¡qué leche tiene Jan con los nombres!) y sustituye a Luisa y a Jaime en la mayor parte de la aventura, pienso yo que Jan dejó descansar a los secundarios, después de haberlos hecho tan partícipes en los álbumes anteriores.
El segundo relato es ¡Banzai! (La bomba). Aquí el McGuffin es una bomba de la segunda guerra mundial. Jaime tiene mucho papel en la aventura. Es maja, pero no demasiado interesante. Suena a relleno tras una aventura tan sumamente desarrollada como la de la Banda del Dragón.
Tomo decimonoveno. Hotel pánico.
Primera edición: abril 1991. Fechas de Jan: octubre del 90 y enero del 91. Sube el precio tras muchos álbumes. Pasa a 275 pesetas (un euro con sesenta y cinco céntimos).
El álbum sigue explotando las localizaciones, pero menos, y las viñetas aumenta en tamaño, con lo que consecuentemente se reduce el número de estas por página. La legibilidad se incrementa al hacerse más ligero, pero el detalle del dibujo no se incrementa en proporción al tamaño. Si en el Periplo búlgaro se optó por la reducción, aquí se toma el camino contrario. Tengo la impresión que no se mantiene el estándar de los tres álbumes anteriores. En mi opinión, este álbum es un tomo normal, pero que después de la calidad impresionante de los anteriores, se nota mucho esa normalidad.
Cuenta con dos historias. La primera es una típica historia de falsos fantasmas que ocultan ¿un negocio fraudulento? ¡Qué va! No os desvelo el final, que tiene mucha gracia.
La segunda tiene un título eterno: La Cosa del Pantano, el Flautista de Hamelín y otras Soserías. Se nota la celeridad con la que fue escrito y dibujado. Sólo hay que mirar la chapuzada de tipología empleada para el título, aunque es Jan el que está detrás y un flojo en él es una obra maestra. Hay una Cosa del Pantano de coña, un payasito de Hamelín y un pueblo idílico como fondo para la aventura.
Primera edición: abril 1991. Fechas de Jan: octubre del 90 y enero del 91. Sube el precio tras muchos álbumes. Pasa a 275 pesetas (un euro con sesenta y cinco céntimos).
El álbum sigue explotando las localizaciones, pero menos, y las viñetas aumenta en tamaño, con lo que consecuentemente se reduce el número de estas por página. La legibilidad se incrementa al hacerse más ligero, pero el detalle del dibujo no se incrementa en proporción al tamaño. Si en el Periplo búlgaro se optó por la reducción, aquí se toma el camino contrario. Tengo la impresión que no se mantiene el estándar de los tres álbumes anteriores. En mi opinión, este álbum es un tomo normal, pero que después de la calidad impresionante de los anteriores, se nota mucho esa normalidad.
Cuenta con dos historias. La primera es una típica historia de falsos fantasmas que ocultan ¿un negocio fraudulento? ¡Qué va! No os desvelo el final, que tiene mucha gracia.
La segunda tiene un título eterno: La Cosa del Pantano, el Flautista de Hamelín y otras Soserías. Se nota la celeridad con la que fue escrito y dibujado. Sólo hay que mirar la chapuzada de tipología empleada para el título, aunque es Jan el que está detrás y un flojo en él es una obra maestra. Hay una Cosa del Pantano de coña, un payasito de Hamelín y un pueblo idílico como fondo para la aventura.
Tomo vigésimo. Un Camello Subió a un Tranvía, en Grenoble, y el Tranvía le está Mordiendo la Pierna.
Primera edición: noviembre de 1991. Jan lo terminó en mayo de es año. 275 pesetas.
Tras muchos álbumes con dos historias, Jan regresa al formato largo.
Es la primera vez que vemos la campaña personal de Jan contra el consumo de drogas en los chicos y chicas. Recupera, y esta vez para siempre, a Martha y a Chico como secundarios, con lo que cierra el elenco de personajes secundarios con dos parejas. Por un lado a Luisa y Jaime como adultos y a Martha y Chico como jóvenes. No hay duda de que Jan lo tenía pensado. La excusa de un viaje al salón del cómic de Grenoble sirve al autor para desenmascarar una trama de tráfico de drogas protagonizada por Refuller y Al Trapone con sus secuaces. Tengo que reconocer que le tengo cierto cariño a este álbum, sobretodo por la aparición de algunos personajes de la Bande Dessinée francesa. Y los dibuja que te mueres. Cuando Jaime delira creyéndose Flash Gordon, Jan está soberbio. No hay duda que es un maestro del dibujo, del caricaturesco y del realista.
Lo que de verdad hace que este número de la serie sea un hito, a parte de una buena historia, es la primera aparición de Ella la Araña. Sólo es una villana secundaria, pero hay que dejarla crecer, como a los pezqueñines.
Primera edición: noviembre de 1991. Jan lo terminó en mayo de es año. 275 pesetas.
Tras muchos álbumes con dos historias, Jan regresa al formato largo.
Es la primera vez que vemos la campaña personal de Jan contra el consumo de drogas en los chicos y chicas. Recupera, y esta vez para siempre, a Martha y a Chico como secundarios, con lo que cierra el elenco de personajes secundarios con dos parejas. Por un lado a Luisa y Jaime como adultos y a Martha y Chico como jóvenes. No hay duda de que Jan lo tenía pensado. La excusa de un viaje al salón del cómic de Grenoble sirve al autor para desenmascarar una trama de tráfico de drogas protagonizada por Refuller y Al Trapone con sus secuaces. Tengo que reconocer que le tengo cierto cariño a este álbum, sobretodo por la aparición de algunos personajes de la Bande Dessinée francesa. Y los dibuja que te mueres. Cuando Jaime delira creyéndose Flash Gordon, Jan está soberbio. No hay duda que es un maestro del dibujo, del caricaturesco y del realista.
Lo que de verdad hace que este número de la serie sea un hito, a parte de una buena historia, es la primera aparición de Ella la Araña. Sólo es una villana secundaria, pero hay que dejarla crecer, como a los pezqueñines.
Antes de terminar, me gustaría añadir un vínculo a la lista que presenté en la primera entrada sobre el treinta y cinco aniversario de Superlópez. Es la página de El Blog Escarolitrópico Gmnemésico Musical de Superlópez. Es una maravilla de blog en el que podéis encontrar como plato fuerte la relación de diversas canciones con las aventuras de Superlópez. El universo del personaje y de la obra de Jan está tratado en profundidad y amenidad, mezclado de manera acertada con comentarios del autor. Además, la presentación de la plantilla (o Template, para que nos entendamos) es soberbia. Muy elegante y espectacular, sin impedir el acceso a los contenidos de manera sencilla. Una delicia, ¿para qué andarnos con rodeos? ¡No dudéis en visitarla!
2 comments:
Estoy de acuerdo en casi todo. Quizá es cuestión de apreciaciones pero la crítica social (o más bien de la Naturaleza Humana) la veo ya desde "El Señor de los Chupetes" o "La Caja de Pandora".
Esta etapa es complicada de comentar por el desorden de publicación en álbum que no sigue el de realización. Incluso en la firma de "El Asombro del Robot", JAN evidentemente se equivocó pues tanto por el estilo de dibujo como por la publicación en la Revista Superlópez no puede ser de 1986.
http://www.elforo.de/superlopez/viewtopic.php?t=82
Una puntualización: "El Génesis" no contiene todos los chistes del álbum de Euredit que en la revista Superlópez sí se fueron publicando:
http://cachislamar.com/superlopez73.htm
También quería decir que "La Ruta de Superlópez" hay que comenzarla en Camprodón con el álbum de "Los Cerditos" como guía. ¡Es alucinante doblar una esquina y reconocer de pronto el letrero de una tienda, una calle, unas escaleras o una vista desde el puente porque está perfectamente plasmado en la historia y sentirse dentro del tebeo! Luego ya seguiremos por Bulgaria o Japón, que pillan más lejos...
Y gracias por el enlace. Me pones colorado...
Gracias a ti, Kaximpo.
La verdad es que de chaval tenía la idea de que no estaban completos los chistes de Euredit, pero cuando hice el comentario del tomo trece, conté el número de páginas apaisadas y me salieron casi igual, por lo que pensé "¡Bah, imaginaciones tuyas! Esto parece completo" y así lo dejé escrito. Es muy difícil tener los datos para saberlo con exactitud si no tienes una copia antigua, así que muchas gracias por los enlaces.
No obstante, debo decir que no estoy haciendo una crítica ni un estudio sobre los álbumes. Sólo comento mi opinión sobre ellos, tratanto de ser lo más acertado posible y dar algún dato de interés al aficionado que conoce al personaje y al que le podría llegar a gustar y no lo ha leído nunca.
Y lo de la publicidad de tu blog... bueno es que la merece.
Un saludo.
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